Barbara acudió al TCU para presentar y evaluar, conjuntamente, la posibilidad del Tribunal probar y aplicar la herramienta Public Financial Management Reporting Framework (PFMRF), desarrollada por la GIZ en asociación con la Organización de las EFS Africanas de Lengua Portuguesa (Afrosai-E).

La herramienta PFMRF busca fortalecer la actuación de las Entidades Fiscalizadoras Superiores (EFS) en la agenda de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), a partir de la premisa de que, sin una buena gestión de las finanzas públicas, no será posible implementar los 17 ODS que fueron acordados en 2015 por los Estados miembros de la ONU, entre los cuales se encuentra Brasil.

De acuerdo con Barbara, además de la oportunidad de intercambiar experiencias con las áreas técnicas, el que llevó a GIZ al TCU fue la “tendencia innovadora” de la Corte de Cuentas. “Nosotros hemos trabajado con esa herramienta en la África de lengua inglesa. Ahora estamos trabajando con la Comunidad de los Países de Lengua Portuguesa (CPLP). En el caso del TCU, nos gustaría recibir insumos para evaluar juntos si la herramienta podría ser adaptada y aplicada aquí, sin ningún costo para el Tribunal”, reforzó. “Nuestro objetivo también es llevarla, de manera más amplia, para la Organización Internacional de Entidades Fiscalizadoras Superiores (Intosai). La interacción con el TCU ayudará a garantir que tengamos un producto de alta calidad para la comunidad de la Intosai y también para apoyar los ODS, en especial, el número 16, que se refiere a la paz, justicia e instituciones eficaces”, explicó la especialista alemana.

El ministro-presidente agradeció la deferencia y afirmó que el trabajo de la Corte de Cuentas ha evolucionado “muy bien y reconocidamente”, del punto de vista técnico y de consistencia, gracias, también, a las relaciones desarrolladas con organismos internacionales, como la propia GIZ y la Intosai, o el Banco Mundial, la Organización de las Entidades Fiscalizadoras Superiores de América Latina y del Caribe (Olacefs) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). “Esa herramienta será muy bien recibida y analizada por nuestros auditores. Estamos a disposición para compartir nuestros conocimientos”, dice Carreiro. “Usted habló de innovación y este es realmente el espíritu del TCU. En los últimos diez años, hemos avanzado significativamente en el uso y mejora de tecnologías que han sido muy fructíferas para el desempeño del papel del Tribunal”, informó.

Para el secretario general de la Organización de Entidades Fiscalizadoras Superiores de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (OISC/CPLP), ministro Walton Alencar Rodrigues, la PFMRF puede representar “avanzos significativos” en el área de control de las finanzas públicas. “Mi conocimiento acerca del funcionamiento de la herramienta es restringido, pero sé de los resultados efectivos que la adopción de la plataforma representó en muchos países”, ponderó.

El secretario de Macroevaluación Gubernamental, Leonardo Albernaz, señaló que el trabajo con instituciones internacionales ha generado “muchos beneficios” para las áreas del TCU que actúan directamente con finanzas públicas. “Hemos tenido retornos valiosos y productivos para la mejora de nuestro trabajo. Refuerzo, aquí, que estamos totalmente a disposición”. 

Participaron también de la reunión el secretario general de la Presidencia, Rainério Rodrigues Leite, el secretario de Control Externo de la Hacienda Nacional, Tiago Dutra, el coordinador general de Control Externo de la Eficiencia Pública, Luiz Akutsu, e integrantes de la Secretaria de Relaciones Internacionales (Serint). Al final del encuentro, ocurrido en el gabinete de la Presidencia, Barbara Dutzel realizó reuniones con integrantes de la Semag, de la SecexFazenda, de la Serint y de la Segecex.