AuditaONU realiza una auditoría durante la fase de transición de la misión de paz en el Líbano

Entre el 15 de septiembre y el 3 de octubre, el equipo del proyecto AuditaONU llevó a cabo una auditoría en la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (FPNUL) para el Líbano (United Nations Interim Force In Lebanon - UNIFIL). El objetivo del trabajo, además de las auditorías financieras y de gestión tradicionales, era comprobar si la misión de paz estaba preparada para la fase de transición, caracterizada por la reducción de efectivos y la transferencia de responsabilidades de seguridad a las Fuerzas Armadas Libanesas (LAF, por sus siglas en inglés).

La auditoría incluyó la evaluación de aspectos relacionados con la liquidez, la gestión de activos, los recursos humanos, la gestión ambiental, las compras, los equipos y los viáticos de las tropas, entre otros. El equipo inspeccionó los equipos militares, las medidas de seguridad y la remediación ambiental, verificó la periodicidad y el contenido de las inspecciones realizadas por la misión y recopiló información sobre los contingentes y los pagos a los países que aportan tropas.

Contexto y desafíos locales

La complejidad de la auditoría refleja la propia situación del Líbano. El clima en la región sigue siendo tenso, incluso después del alto el fuego entre Israel y Hezbolá en noviembre de 2024. Los ataques aéreos, llevados a cabo por aviones o drones, se producen casi a diario en diferentes partes del Líbano, especialmente al sur del río Litani, donde se concentra el área de operaciones de la FPNUL.

La auditoría se llevó a cabo en un momento delicado, ya que, además de la inestable situación política y militar, en agosto el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas decidió prorrogar el mandato de la misión por última vez hasta el 31 de diciembre de 2026, con la intención de retirarse gradualmente a partir de 2027. Esta transición genera incertidumbre sobre la estabilidad futura de la región y aprensión entre los funcionarios locales, muchos de los cuales llevan décadas trabajando allí y se enfrentarán a la interrupción de sus vínculos. La FPNUL debe gestionar simultáneamente el mantenimiento de las operaciones en curso y la planificación del cierre de la misión.

Los auditores solo pudieron acceder al terreno siguiendo estrictos protocolos de seguridad. El equipo se desplazó siguiendo un detallado plan logístico que había sido previamente comunicado a la FPNUL para garantizar la integridad de los auditores y la eficacia de su trabajo.

Durante sus actividades sobre el terreno, el equipo visitó una de las bases avanzadas de la misión, ubicada cerca de la Línea Azul, en el sur del Líbano. Allí, documentaron los impactos humanitarios y materiales del conflicto, como pueblos destruidos y familias desplazadas, lo que pone de manifiesto los elevados costos de la guerra.

Las actividades se concentraron en el cuartel general de la UNIFIL, en Naqoura, en el extremo sur del país, cerca de la frontera con Israel. El equipo estableció su base en Tiro, una ciudad costera situada a unos 38 kilómetros, que funciona como principal punto de apoyo de la ONU en la región.

FPNUL: complejidad en medio de la diversidad

Creada en 1978, la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) es una de las mayores misiones de paz de las Naciones Unidas, con unos 10,5 mil cascos azules de 48 países, distribuidos en 50 bases a lo largo de 1.060 km². Es la única misión que cuenta con una Fuerza de Tarea Marítima, compuesta por cinco barcos que patrullan la costa libanesa para prevenir el contrabando de armas.

La auditoría fue coordinada por José Arimathea Valente Neto, secretario del TCU en Rio Grande do Norte, y contó con la participación de los auditores Getúlio Martins Padilha Júnior y Vitor Forjaz Rodrigues Caldas, ambos de AudPortoFerrovia; Jordana Farias Pereira, de AudBenefícios; Luciano Aires Teixeira, secretario del TCU en Santa Catarina; y Ricardo Broegaard Jonas, de SecexONU, que siguió los trabajos de forma remota.